martes, 21 de mayo de 2013

Carta al lector


Un enigma, el enigma, mi enigma. Es el enigma un interrogante, una pregunta? Es mi enigma una pregunta? Es mi enigma el tuyo, lector? No, seguro que no. Seguro que mi enigma no es el tuyo, que tampoco es una pregunta y que mucho menos es uno sólo. Mi enigma no es uno, pero funciona como uno cuando toma esa gran fuerza que impulsa los interrogantes, esos que guían mi mirada en el mundo. El enigma es la sensación de desesperación encausada en una búsqueda. El enigma es la pasión, la pasión es enigma. Es así que el enigma se convierte en un profundo impulso, el impulso de un viaje.
VI – A – JES, sí, VIAJES! el avión que despega, la nariz marcada en la ventanilla de un colectivo, los pasillos de un tren, el libro abierto sobre el escritorio. Viajes.
 Y mi viaje por este mundo, que es, en parte, también el tuyo, puede resultar un indicio, un roce o una simple caricia en tu búsqueda, lector, y la tuya en la mía. Por eso es que deseo tanto leerte.
Este enigma es una fuerza que nos permite renovarnos en un retorno novedoso hacia la infancia, para retomar la mirada del niño en cada acto de la vida cotidiana.
En El impulso del enigma se escribe y se lee sobre aquellas pequeñas vidas, la tuya, la mía, la de un gran poeta del siglo XVIII o la del barrendero de la esquina que se enamoró de la kiosquera. Este blog va a hablar sobre la vida cordobesa y toda aquella otra vida que atrape mi atención (o la tuya) por algo en particular. Eso implica que se puede encontrar desde una crítica de La bella mentirosa o un cuento poco conocido, hasta un relato sobre un beso de dos viejos en la esquina de cañada y 27 de abril. El impulso del enigma es un blog para aquellos que disfruten de ver la cotidianeidad como un libro añejo que se quiere recorrer completo sin reglas precisas.
Y si se trata de amor? Si se trata de amor va a ser seguro un gran relato, uno de esos que uno quiere leer hasta el final y un poquito más.
Y se les da lugar a todos estos ámbitos porque elijo escribir sobre aquellas cosas que pueden cambiar el rumbo de un día, porque puede despertar muchas preguntas o ser simplemente una caricia. Y nada es tan valioso como una caricia en la siesta otoñal.
Hola lector, te saludo y te invito, a leer, a escribir, te invito a jugar lector, a jugar con las palabras y las ideas, jugar para crear, para mirar distinto, para reconstruir los recovecos, los aromas, las imágenes, el comienzo, la vuelta, el fin.
Para aquellos que consideran que descubrir un rincón extraño de un lugar común es, no un escape, sino una profunda conexión con el otro, para aquellos que eligen experimentar el mundo desde el impulso que produce el enigma, para aquellos, como vos lector, es que yo escribo.